08 nov 2020

Pfizer: “extraordinarios resultados”

El 9 de noviembre la farmacéutica Pfizer anunció que había obtenido resultados preliminares “extraordinarios” en los estudios clínicos de su vacuna contra la covid-19, desarrollada junto a la empresa alemana BioNTech.

La inoculación está basada en una tecnología que nunca se ha usado antes, conocida como mRNA, y ha mostrado una efectividad del 90% tras probarse en más de 43.000 voluntarios. No obstante, todavía hay incógnitas acerca de la durabilidad de su protección, entre otras. En cuanto a los efectos secundarios, de momento no se ha detectado ninguno significativo pero la vacuna todavía debe ser aprobada por las diferentes agencias de salud pública, algo que se cree podría suceder a finales del presente año. Pfizer tendría capacidad para producir 50 millones de dosis en 2020 y 1.300 millones en 2021, lo que permitiría la protección de más de 650 millones de personas en el próximo año (al necesitar dos vacunaciones). EE.UU. tiene un contrato que le garantiza 100 millones, mientras que la UE ha alcanzado un acuerdo preliminar por el que se le suministraría 200 millones (ampliables en 100 millones más). Las empresas han establecido el precio de cada dosis en 19,5$ y, al contrario que otras como AstraZeneca y Johnson&Jonhson, no han prometido su disponibilidad a precio de coste, lo que supone un importante hándicap a su accesibilidad en países pobres. A esto se suma el reto logístico que supondrá su distribución: es necesario mantenerla a una temperatura de -70ºC, algo muy complicado de conseguir incluso en Occidente. El anuncio, no obstante, ha sido recibido con fortísimas subidas en bolsa en todo el mundo, especialmente en aquellas empresas relacionadas con el turismo.

Otras vacunas

Alrededor de 260 vacunas contra la covid-19 se encuentran en desarrollo, diez de las cuales han llegado a la última fase de ensayos clínicos. La consultora McKinsey estima que finalmente habrá entre 7 y 9 vacunas efectivas. Estas investigacione se desarrollan sobre distintas tecnologías (RNA, DNA, vector viral, unidad proteica, etc.), lo que influye en las velocidades de obtención y su capacidad de producción: por lo general, aquellas que pueden desarrollarse rápidamente no permiten una fácil escalada de su elaboración, y viceversa. La disponibilidad de varios tipos de vacunas facilitaría enormemente su distribución a gran escala. De momento, no se ha establecido un criterio internacional de acceso a la vacuna, si no que su compra y distribución dependerá de cada país. No obstante, se espera que, al menos en países occidentales, los primeros en recibir la vacuna serán los mayores de 65 años y otros grupos de riesgo. A continuación, se vacunarían los sanitarios, dada su elevada exposición al virus, con el fin de proteger a estos trabajadores esenciales y limitar su potencial de contagio.

pfizer vacuna biontech
Compártelo:

Te podría interesar