Seguir leyendo Seguir leyendo Aprincipio de la década de los 90, el geopolítico estadounidense Joseph Nye definió, en su libro Bound to lead: The changing nature of Ame-rican Power, el término “soft power” (poder blando): la habilidad de un país de incre-mentar su influencia en el exterior a través de sutiles instrumentos alejados del terreno béli-co. El cine, la gastronomía, la música o el idio-ma pueden convertirse en herramientas efica-ces para mejorar la imagen de un país, incre-mentar la influencia en el exterior o persuadir a otras naciones. Se trata, pues, de un concepto dentro de la po-lítica exterior que se contrapone al denomina-do “poder duro”, entendido este como el uso de las capacidades militares para forzar la vo-luntad de terceros países. LA PASIÓN TURCA