La debilidad en el sector industrial anticipa un nuevo plan de estimulo

Los beneficios en la industrial cayeron un 5,5% interanual en octubre, el mayor descenso desde junio, frustrando las esperanzas de que los sólidos resultados previos señalaran un repunte definitivo. Esta caída se suma a una serie de indicadores de octubre que apuntan a una pérdida de impulso: las ventas minoristas se desaceleraron por quinto mes, alcanzando el crecimiento más débil en un año, y la inversión fija registró una sorprendente caída interanual del 1,7% entre enero y octubre, la mayor desde la pandemia. Los últimos datos señalan además que la debilidad se extendió a noviembre. Si bien el PMI manufacturero oficial de noviembre mejoró ligeramente a 49,2 sigue indicando contracción. Pero más allá, los índices privados y no manufacturero cayeron, indicando un retroceso no solo en la construcción sino también en el sector servicios. Todo apunta a que la demanda interna sigue siendo débil, el empleo se contrajo por trigésimo mes y los precios de producción continuaron a la baja. Aunque se espera que se cumpla el objetivo de crecimiento del PIB del 5% para el año, estos datos incrementan la expectativa de que el gobierno pondrá en marcha un nuevo paquete de estímulos en el primer trimestre del próximo año.