Moderación del endeudamiento

En concreto, descendió diez puntos porcentuales, hasta el 238% del PIB, debido al elevado ritmo de crecimiento registrado en un buen número de países y al entorno inflacionario. El endeudamiento se aleja, pues, de los máximos alcanzados en 2020 (258% del PIB); ahora bien, continúa estando ligeramente por encima de los valores alcanzados antes de la pandemia. El descenso fue más pronunciado entre los hogares y las empresas no financieras. Por el contrario, el endeudamiento del sector público se redujo a un ritmo más moderado. A nivel geográfico, la caída se ha producido, especialmente, en los países desarrollados. En cambio, en un buen número de economías emergentes el nivel de los pasivos en relación con el tamaño de la economía registró una variación positiva. Especialmente relevante resulta la evolución en China. La deuda con relación al PIB (272%) se sitúa ya en valores similares a los de Estados Unidos, como consecuencia del creciente endeudamiento del sector privado. El FMI calcula que el 28% del total de la deuda de las empresas no financieras corresponde a entidades chinas, un porcentaje superior al peso del país asiático en la economía mundial.