12 ene 2025
Trump y los límites territoriales
Desde su victoria electoral, las amenazas expansionistas, comerciales y militares plagan las ruedas de prensa de Donald Trump.
A una semana de su toma de posesión, el magnate ha reincidido en la necesidad de controlar Groenlandia o el Canal de Panamá argumentando cuestiones de seguridad nacional. De hecho, ha añadido que no dudaría en emplear el uso de la fuerza militar o métodos de coerción económica para ello. También ha amenazado con la anexión de Canadá, que se convertiría en el Estado número 51 de los Estados Unidos, o con el cambio de nombre del Golfo de México por Golfo de América. Si bien aún se desconoce cómo de reales son sus intenciones, sus declaraciones suscitaron la respuesta inmediata de la primera ministra danesa, Mette Frederiksen, quien recordó que Groenlandia es una región autónoma de Dinamarca que “no está en venta”. El canciller de Alemania y el ministro de Exteriores de Francia también advirtieron de que Groenlandia está cubierta por la cláusula de defensa mutua de la UE. Mientras, el ministro de exteriores panameño, Javier Martínez-Acha, ha subrayado que la soberanía del Canal de Panamá “no es negociable” y ha negado que sea China quien realmente gestiona la ruta comercial, tal y como asegura Trump. La mayor parte de los republicanos han tildado las amenazas de Trump como “broma”, asegurando que se trata de una forma de negociación. Sin embargo, se trata de amenazas que, de convertirse en realidad, costaría justificar ante la comunidad internacional y que, en realidad, no distarían mucho de las posturas irredentistas de Rusia sobre Ucrania o China sobre Taiwán.