30 nov 2025
Nueva ola de condenas agrava la crisis institucional
Perú vuelve a ver a sus expresidentes ante la justicia. Esta semana, Martín Vizcarra fue condenado a catorce años de prisión e inhabilitado por nueve, tras ser hallado culpable de recibir sobornos en dos obras públicas cuando era gobernador de Moquegua.
Por otra parte, Pedro Castillo recibió 11 años y cinco meses de cárcel por conspiración en el fallido autogolpe de 2022; el tribunal concluyó que actuó junto a su entonces primera ministra, Betssy Chávez, hoy refugiada en la embajada de México, lo que mantiene abierta una crisis diplomática.
Con estas condenas, Perú acumula ya cuatro expresidentes encarcelados simultáneamente —Toledo, Humala, Vizcarra y Castillo— y seis jefes de Estado depuestos o dimitidos desde 2018, un patrón que evidencia la erosión sostenida del sistema político. Con elecciones previstas para 2026, este deterioro generalizado y el descrédito de las fuerzas tradicionales podrían abrir espacio a un candidato de derecha con un discurso de orden, aunque difícilmente aliviarán la inestabilidad estructural que el país arrastra desde hace años.