05 mar 2023

Posibles escenarios para la guerra

Un año después de que Rusia lanzase los primeros misiles sobre territorio ucraniano la guerra está más lejos que nunca de resolverse.

Los discursos que dieron tanto Putin sobre el estado de la nación en la Duma como Biden en su visita a Kiev en el primer aniversario del conflicto apuntan a un enfrentamiento de larga duración. Lo cierto es que los distintos escenarios bélicos que se anticipan apenas han variado desde que Putin anunciase que la “operación militar especial” se centraría solo en la región del Donbass. O bien Rusia consigue avanzar y ocupar más territorio del que ya controla en el este o bien Ucrania hace retroceder a las tropas rusas y logra recuperar el territorio ocupado. Lo que sí que ha cambiado es el equilibrio de fuerzas y el tipo de enfrentamiento que está teniendo lugar. A la inesperada resistencia inicial de las tropas ucranianas se le ha sumado el apoyo indispensable de los aliados occidentales. De acuerdo con los datos del Instituto Kiel para la Economía Mundial, los miembros de la Alianza han apoyado a Ucrania con alrededor de 80.500 mill.$ en 2022, tanto en ayuda militar como humanitaria. Estados Unidos es, de lejos, el mayor contribuyente con alrededor de 48.000 mill.$, seguido de lejos por Reino Unido. Según lo anunciado recientemente, los gobiernos occidentales van a continuar este apoyo hasta que Ucrania venza. Sin embargo, la duda que se plantea es si los países de la OTAN realmente pueden mantener dicho compromiso. Rusia lleva dos semanas atacando con dureza la ciudad de Bajmut, en el oblast de Donetsk, con el objetivo de lanzar desde allí ataques aéreos hacia otras ciudades del este del país. Actualmente, Rusia se encuentra en una posición militar mucho más debilitada que cuando comenzó la guerra. Se estima que, entre muertos y heridos, las bajas rusas se sitúan entre los 175.000 y los 200.000 soldados y no cuentan con demasiada munición. Sin embargo, la cuestión que se plantea es si Ucrania se encuentra en una posición lo suficientemente favorable para aprovechar esta situación. Actualmente, las tropas ucranianas también enfrentan escasez de munición, los tanques que se han comprometido a enviar los miembros de la OTAN no han llegado y las tropas no han recibido la formación adecuada para utilizarlos. Si bien nadie se atreve a valorar qué parte resultará vencedora en esta ofensiva, todos los analistas coinciden en que estos enfrentamientos no supondrán el final del conflicto. La guerra muy probablemente acabe resolviéndose en una mesa de negociación en un lugar y momento indeterminado aún.

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