Primera reunión entre los dos bandos enfrentados

Son las primeras conversaciones entre el ejército de Sudán, que está liderado por Abdel Fattah al-Burham, jefe de Estado de facto, y el grupo paramilitar RSF (Rapid Support Forces), por el general Mohamed Hamdan Dagalo, conocido como Hemedti, una iniciativa propuesta por Estados Unidos y Arabia Saudí. El establecimiento de un alto al fuego firme (en contraposición a las treguas declaradas hasta ahora, que no han sido respetadas por ninguna de las partes) y un corredor humanitario, además de la protección de las infraestructuras civiles, son los temas que ocuparán la negociación, posponiendo el acuerdo en objetivos de carácter político. Hasta ahora, los combates han resultado en más de 550 muertos y 5.000 heridos y, según la ONU, el número de sudaneses huyendo a otros países de la región alcanzaría los 860.000. La población sudanesa, que ya antes del comienzo de los combates se mostraba muy crítica con ambos líderes y apoyaba la transición a la democracia, se enfrenta ahora a la posibilidad de un conflicto de mayores proporciones. Aunque los enfrentamientos se concentran en la capital, Jartum, la región de Darfur también ha presenciado importantes choques entre los dos bandos.