Guerra mundial comercial

Los “aranceles recíprocos”, según las declaraciones de Trump, obedecen a las barreras no arancelarias y manipulación de los tipos de cambio por parte de sus socios comerciales. Sin embargo, en la práctica, el cálculo de los aranceles aplicados (entre el 11% y el 50%), tanto a rivales como a aliados (57 países en total), se basa exclusivamente en el déficit comercial que EE.UU. tiene con cada país. El arancel teórico se ha calculado dividiendo el déficit comercial bilateral entre las importaciones de EE.UU. a ese país; después se ha aplicado la mitad de ese arancel teórico (Trump sostiene por ello que se trata de una “versión amistosa”). Para los países con los que EE.UU. tiene superávit se ha aplicado un arancel mínimo del 10%. El resultado con todo es impactante, especialmente para los países asiáticos con amplios superávits comerciales con EE.UU.  A China, el gran rival geopolítico, se le aplica un arancel del 34%, que sumado al arancel del 20% aprobado el mes pasado se traduce en un arancel adicional del 54% en 2025. Si tenemos en cuenta que Trump ya subió los aranceles a China un 20% en su primer mandato, el arancel general sobre productos chinos quedaría en el 74%. Esto equivale a llevar a la práctica un decoupling de la principal potencia manufacturera. Se produciría una disrupción de graves consecuencias para las cadenas de valor global. Poco refugio encontrará nadie en el “friendshoring”, o relocalización en zonas geográficas “amigas”. Los aliados en Asia también se ven muy afectados. Especialmente Vietnam (46%), Camboya (49%), Tailandia (36%) o Indonesia (32%), cuya economía depende enormemente de sus exportaciones a EE.UU.; otros, como Japón o Corea del Sur, son castigados con un 20% y un 25%. La UE, el gran socio comercial de EE.UU., le aplicaría "tan solo" un 20%. En cambio, Latinoamérica, dado que en general mantiene desequilibrios comerciales a favor de EE.UU., se vería afectada solo por aranceles del 10%. No se han anunciado nuevos aranceles sobre Canadá y México, a los que ya aplica el arancel del 25% que entró en vigor a principios de marzo, excluyendo los productos que cumplen con el T-MEC Apenas quedan unos días para frenar lo que parece una declaración de guerra mundial comercial. El arancel general del 10% entró en vigor el pasado día 5 de abril y los aranceles recíprocos individuales entrarán en vigor el próximo miércoles 9 de abril.