Dar el salto a mercados emergentes es el objetivo de miles de pequeñas y medianas empresas. Un proceso en el que no faltan piedras en el camino, y la primera de todas ellas es la falta de una estrategia bien definida. ?El 80% de las pymes no ve la internacionalización como algo estratégico, sino como una búsqueda de dinero fácil en forma de subvenciones para salir al exterior?, señaló el consultor de comercio exterior Juan Suárez Terol en las ?Jornadas de Comercio Internacional en Países Emergentes? organizadas por el escuela de negocios
ESCP Europe y el
Instituto Internacional de Conocimiento Empresarial (IICE). Para no perderse en el exterior, los expertos asistentes a dichas jornadas plantearon la necesidad de desarrollar cuatro pasos claves: ver la internacionalización como un paso estratégico, no temporal; coordinación de las administración central, autonómica y local para ayudar a las pymes; formar a los directivos para que conozcan los puntos fuertes y débiles de los nuevos mercados; y vencer el pánico general que existe actualmente ante la marca ?made in Spain?.
Las grandes compañías como ejemplo Telefónica, Inditex, Mercadona o Mango fueron algunos de los ejemplos que pusieron los expertos para vencer ese pánico general a la marca España, modelos que contribuyen de manera activa a reforzar la imagen española en el exterior. Según Suárez Perol, ?lo mejor es conocer las peculiaridades de cada mercado y establecer una mejor conexión con el país de destino?. Respecto a las administraciones, es necesario que éstas estén coordinadas para facilitar a las pymes un asesoramiento completo y claro para agilizar sus procesos de internacionalización. Mientras que las empresas deben formar a sus directivos en aquellos campos de desconocen como pueden ser los aspectos legales, culturales o políticos propios del país de destino. Para ello es fundamental conocer los puntos fuertes y débiles de la economía en las que las empresas quieren desarrollar sus negocios para así, saber cómo robar mercado a la competencia local. Y no olvidar el marco legal del país para evitar la entrada en sectores prohibidos, incumplir el pago de impuestos o encontrarse con trabas que obstaculicen la actividad de la compañía.