La visión de los empresarios sobre la marcha de su negocio ha empeorado desde el último trimestre del pasado año, de acuerdo con lo que apunta el
Índice de Confianza Empresarial elaborado por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Casi el 17 % de los gestores de establecimientos empresariales considera que la evolución de su actividad será favorable durante el primer trimestre del año que comienza, mientras que más del 19% opina lo contrario. El resto considera que será normal. En el trimestre anterior, cerca del 22% mantenía una opinión positiva mientras que las respuestas negativas se quedaban en el 17%. Esto solo expone la necesidad de hallar oportunidades de negocio, algo que se puede alcanzar con la ayuda de las herramientas de geomarketing. Los problemas a los que se tienen que enfrentar para mantener los beneficios en sus resultados son los que enturbian la visión de los responsables sobre el futuro de la empresa. Una mayor competencia, que repercute en pérdidas de clientes, la morosidad entre los actuales consumidores o usuarios y las dificultades para financiarse, así como la complejidad de encontrar nuevos clientes, se encuentran en esta lista. Por eso es tan importante la búsqueda de potenciales clientes, tarea en la que las herramientas de geomarketing pueden ser de gran ayuda al permitir
el uso de tecnologías de localización de datos en mapas para analizar carteras de clientes, proveedores y competidores. Y es en las empresas más pequeñas, de acuerdo con la encuesta del INE, donde esta visión se torna más negativa. La confianza disminuye en cuatro de los cinco tamaños de establecimientos analizados, siendo el intervalo de Menos de 10 asalariados, las microempresas, el que presenta el mayor descenso, superior al 2%, mientras que el de Más de 1.000 asalariados es el único en el que sube, un 0,6%. Las tecnologías para el tratamiento de datos han avanzado mucho en los últimos años. El volumen de información que pueden analizar y la rapidez con la que lo hacen se ha multiplicado de forma exponencial. En lo referente al campo de la búsqueda de posibles clientes, estos desarrollos han dado paso a herramientas que hacen más sencilla esta complicada tarea, como las soluciones de geolocalización para marketing que ofrecen marcas de referencia como
eInforma. Permiten realizar un análisis de las carteras de clientes, proveedores y competidores dentro del ecosistema de un negocio y detectar así las zonas de mayor rentabilidad para optimizar las acciones de captación de nuevos clientes y su retención.
Cómo funcionan las herramientas de geomarketing para buscar clientes
El universo que abarcan es amplio. En el caso de la solución de geomarketing de eInforma es posible realizar consultas territoriales sobre 3,2 millones de empresas y autónomos activos y 46 millones de consumidores de España. Su funcionamiento no es complicado: a través de filtros (como el sector de actividad, volumen de facturación, volumen de empleados o índice de riesgo) se perfila el mercado para descubrir dónde están los prospectos. Se seleccionan las áreas de proximidad que se desea priorizar (por dirección, secciones censales, códigos postales, municipios, provincias y comunidades autónomas) y se obtiene un listado con los datos actualizados (como razón social, CIF, dirección completa, actividad CNAE, rango de empleados y ventas, rating de riesgo, antigüedad, forma jurídica, teléfono y cargos directivos). A las prestaciones básicas de la herramienta se unen módulos personalizados que habilitan la carga, actualización y analítica de datos propios de la empresa, para su geolocalización y cruce con la información empresarial y socio-demográfica general de España. Así es posible tomar como referencia los buenos clientes de una compañía y buscar referencias espejo (con las mismas características) en las zonas de interés. Gracias a estas herramientas las pymes pueden sacar provecho del Big Data para la localización de nuevos clientes haciendo esta tarea más sencilla y consiguiendo referencias de calidad que optimicen sus acciones de marketing. También permite planear tácticas comerciales con mayor facilidad, como la creación de zonas de influencia o la apertura de puntos de venta.