Los diez países con mayores reservas de petróleo

Diego Herranz - Colaborador de Asesores de Pymes externo a Cesce

Los productores de petróleo del planeta no son siempre naciones estables, ni países garantes de la seguridad jurídica o ejemplos de conciliación geopolítica. Más bien al contrario, algunos de ellos han hecho tambalearse los cimientos de la arquitectura financiera internacional y generado crisis económicas de primera magnitud. La mayor de ellas, la de los años setenta, petrolífera, de la que emergió la OPEP, el cártel que dictamina el volumen de crudo que fluye -y las cuotas, en barriles diarios, de cada uno de sus miembros aporta- a los mercados energéticos.

De igual modo, su poder de extracción, comercialización y venta a clientes en el mercado no es equiparable con exactitud al peso de sus exportaciones. Venezuela ostenta las mayores reservas probadas de crudo. Por delante de Arabia Saudí, la nación dueña y señora de los designios de la OPEP y gran suministradora de oro negro. Sin embargo, la inestabilidad política y económica de Caracas y su déficit tecnológico, productivo y empresarial para bombear crudo de las enormes balsas energéticas sobre las que descansa su territorio, le resta influencia como regulador de la espita de petróleo que se coloca en el mercado.

Por contra, y según la Agencia Internacional de la Energía (AIE), EEUU, que ha sido durante varios años el mayor exportador neto de crudo -al hacer usos puntuales de sus reservas estratégicas- estima que la mayor potencia económica global -y durante décadas, hasta la irrupción de China como superpotencia, el mayor comprado de crudo- estaría en disposición de suministrar más de 36.000 millones de barriles al mercado en caso de que la Casa Blanca decidiera abrir de par en par sus reservas disponibles.

En este contexto, estos son los países, por orden creciente, con mayor capacidad productiva de petróleo, según oil.com:

10.- Libia. El país magrebí tiene estimadas alrededor de 48.300 millones de barriles de crudo en reservas. Aún se le considera un pequeño productor, con una media de 1,2 millones de barriles diarios, que pueden alterarse por inestabilidades políticas y luchas de poder entre facciones con intereses en esta fuente energética y que generan conflictividad civil.

9.- EEUU. Las balsas de crudo americano difieren. Son, de hecho, un secreto de Estado. Asunto de seguridad nacional. La World population Review eleva sus reservas a 68.800 millones. Puede abrir la espita hasta convertirse en el principal exportador neto, como ha hecho en dos ocasiones en el último decenio y medio. 

8.- Kuwait. Con algo más de 101.500 millones de barriles de reservas probadas, según la OPEP, produce entre 2,4 y 2,67 millones de barriles diarios y exporta 1,7 millones. Para 2030, Kuwait Petroleun Corporation planea impulsar su cuota por encima de los 4 millones de barriles diarios y dice no estar preocupado por la anticipada caída de la demanda global de petróleo.

7.- Emirato Árabes Unidos (EAU). El tercer mayor productor de la OPEP maneja más de 111.000 millones de barriles, aunque extrae una media de 2,7 millones de barriles diarios y exporta casi 2,3 millones. EAU es un ejemplo del uso del negocio petrolífero para diversificar sus estructuras productivas, con iniciativas, ya palpables, de incremento del turismo de lujo y de la creación de un hub de alta tecnología en sus siete emiratos confederados.  

6.- Rusia. Con algo más de 80.000 millones de barriles de reservas probadas, según la AIE, y con una capacidad productiva diaria de 9,4 millones de barriles en la actualidad, a pesar del embargo al crudo siberiano por la invasión de Ucrania. Antes del estallido del conflicto, era habitual que superara los 11 millones. Aun así, sus exportaciones de crudo y de combustibles refinados han vuelto a los niveles previos al conflicto armado. 

5.- Irak. Segundo productor de la OPEP, dispone de 145.000 millones de barriles para un poder de extracción diario de 4,5 millones. Sus ventas al exterior promedian 3,4 millones al día, con la ambición, como Kuwait, de superar el caudal de crudo saudí. Los analistas, sin embargo, ponen el límite en los 6,3 millones de barriles en los próximos cinco años.

4.- Irán. Con más de 208.600 millones de barriles, produce alrededor de 2,39 millones al día de los que exporta 760.000, según la OPEP, debido, por un lado, a una substancial brecha de gestión y de capacidad de extracción y de comercialización, por intereses espurios, entre sus reservas, su producción y sus exportaciones y, por supuesto, por las sanciones impuestas por EEUU por el programa nuclear de Teherán. A finales de 2022, por varios de estos factores ocultos, llegó a poner en el mercado 1,13 millones de barriles al día, trayectoria que mantiene en 2023.

3.- Canadá. Alberga 171.000 millones de barriles en su subsuelo. En su mayoría -unos 166.300 millones- arenas bituminosas (oil sands), concentrada en la región de Alberta que supondrían la décima parte del total de reservas mundiales. Aportó más de 5 millones de barriles diarios a lo largo de 2022, un récord histórico. Con producción en aumento a pesar de la apuesta de Ottawa por las fuentes renovables. Una reciente encuesta de Ipsos sitúa a Canadá como el suministrador preferido a escala global.

2.- Arabia Saudí. Supera los 267.000 millones de barriles, en 2021 superó la barrera productiva de los 9 millones diarios y de los 11,5 en 2022, aunque los últimos recortes que han decretado en la OPEP +, que maneja a su antojo, junto con Rusia, en la versión ampliada del cártel, han reducido su cuota en medio millón. Riad planea elevar hasta los 13 millones su capacidad diaria en 2027. Cota -dicen- próxima a su potencial máximo. 

1.- Venezuela. Las estimaciones hablan de unas reservas por encima de los 300.000 millones de barriles. Las sanciones estadounidenses, aún en vigor, una crónica crisis económica y los elevados grados de corrupción han diezmado la capacidad de extracción del oro negro, que se catapultó a partir del cambio de milenio con los nuevos descubrimientos de yacimientos. En 2022 apenas fue capaz de extraer entre 600.000 y 700.000 barriles diarios, poniendo casi su totalidad en el mercado.