Refuerce la seguridad en vacaciones

Aunque el periodo vacacional es un momento de descanso o de menor ajetreo para algunas pymes, también puede convertirse en la etapa de mayor actividad para otras. Muchos comercios no solo continúan con su negocio abierto durante estos meses, sino que éste se ve potenciado con la llegada de nuevos y numerosos clientes. Es algo que saben bien los establecimientos situados en localidades turísticas, ya sean costeras o del interior, que se encuentran con un comprador diferente al habitual y, por lo tanto, desconocido. Esta nueva situación entraña más peligros y riesgos de sustracciones y robos de los que el comerciante soporta normalmente en otras épocas del año, por lo que es recomendable que aumente también las medidas de seguridad y protección. Además, debe tener en cuenta que la prevención no debe limitarse únicamente a la propia tienda o comercio, sino que ha de extenderse también al almacén y a los centros de distribución, ya que en estos lugares también pueden producirse hurtos. El primer consejo que dan los expertos en este contexto es dotarse de un sistema de cierre seguro, pero no solo para la puerta principal sino también para cada uno de los accesos al establecimiento, es decir, patios, escaleras, ventanas, almacenes, etc. Tampoco hay que olvidarse de las salidas ocultas, si existen, y de las de emergencia, que se pueden convertir en la mejor vía de entrada para los ?cacos?. El segundo elemento clave en esta carrera por la seguridad es el sistema de alarma, que será más eficaz si está conectado a una centralita de vigilancia concertada con la policía. Si todavía no dispone de este sistema, no tarde en adquirirlo e instalarlo, ya que los establecimientos que no cuentan con una protección de este tipo suelen ser los primeros en recibir visitas desagradables. Además, no solo ha de instalarlo sino también hacerlo visible desde el exterior, para que al potencial ladrón le quede bien claro que la entrada en el comercio le será muy difícil. El sistema de alarma protege de la entrada de intrusos en el comercio cuando está cerrado. Pero también habrá que prever los posibles hurtos que se produzcan en el interior cuando el local esté abierto. Para ello, el mecanismo de seguridad se puede completar con etiquetas de seguridad y otros elementos de protección electrónica de artículos. Un cuarto dispositivo de protección puede consistir en cámaras internas de video-vigilancia. Lo recomendable es un circuito cerrado de televisión de alta definición, ubicado en los puntos más estratégicos del establecimiento, que permita conocer la situación de todos los clientes en cada momento y que facilite el seguimiento de aquellos cuyo comportamiento sea sospechoso. Entre otras medidas de seguridad que pueden tener buen resultado se encuentran también los detectores de metales, que avisan sobre la entrada de inhibidores de frecuencia y de bolsas metalizadas con las que algunos ladrones pretenden sortear los sistemas electrónicos de protección. Así como la instalación de un timbre de apertura para la puerta, un pulsador de alarma silenciosa, y un sistema de intercomunicación directa (teléfonos, interfonos?) entre los diferentes empleados o zonas del establecimiento. Finalmente no olvide ?en los casos en que sea necesario- instalar cajas de seguridad con apertura retardada. Todo ello le ahorrará más de un disgusto.